Jacqueline Lee Bouvier, quien fue esposa del presidente John F. Kennedy, murió un 19 de mayo de 1994 a causa de un linfoma en etapa avanzada. De clase alta, físico atractivo y buena educación, Jackie conquistó el corazón del mandatario más joven de Estados Unidos.
El carisma en público y su estilo impactaron a la sociedad de los años 60. Ella era un modelo a seguir y, a pesar de las fechorías de su esposo, así como la pérdida de dos hijos, siempre se mantuvo como una mujer fuerte.
Pareciera que su vida fue de ensueño; sin embargo, algunos secretos envuelven su vida. Estos son algunos de ellos:
1. En 1951 se graduó como Bachelor of Arts en literatura francesa y poco después fue fotógrafa indagadora en el The Washington Times-Herald, donde debía realizar preguntas al público en la calle, para después colocarlas en el impreso.
3. El libro These Few Precious Days: The Final Year of Jack With Jackie asegura que la primera dama sabía de los romances extramaritales de su esposo; sin embargo, prefería pasar de largo las relaciones, pues no representaban peligro alguno.
A pesar de esto, siempre se supo de una rivalidad con la actriz Marilyn Monroe, quien sí representaba una amenaza a su reino de perfección.
4. El vestido Chanel rosa que vistió el día en que asesinaron a Kennedy se encuentra en un lugar confidencial, donde los Archivos Nacionales (NARA) lo mantienen bajo vigilancia y climatizado para que no sufra deterioro.
Momentos después del asesinato, Jackie no quiso quitarse el vestido manchado con la sangre de su esposo hasta la madrugada del día siguiente, cuando regresó a la Casa Blanca. Caroline Kennedy, su heredera, tomó la decisión de que la prenda no se puede exhibir hasta el 2103.
5. The Irish Times ventiló que cuenta con una serie de 130 páginas de correspondencia entre Jackie y un sacerdote irlandés. En los textos, supuestamente reveló lo que sentía respecto a las políticas de su marido, su obsesión con las mujeres y el asesinato del presidente.
También aseguró que la ambición la superó y que hubiera preferido dar su vida antes que perder a su esposo.