Hace 50 años en el 10050 de Cielo Drive, Benedict Canyon, en el norte de Beverly Hills, en Los Ángeles, California, se produjo uno de los más sádicos asesinatos de la historia, tras lo cual comenzó una oleada de pánico en Hollywood; entre las víctimas se encontraba la actriz Sharon Tate, quien tenía 26 años y ocho meses de embarazo.
¿Los autores? Cuatro integrantes de la secta “La Familia”, adoradores de Charles Manson, entraron a dicho domicilio armados con cuchillos en una época en la que abundaban los lemas de “amor y paz”, de la cultura hippie.
Sharon Tate, nominada al Globo de Oro en 1967, era considerada una de las actrices más prometedoras de Hollywood, y hasta hoy en día se llevan a cabo exposiciones en su honor.
Sharon Tate en Hollywood
Una historia de mucha violencia y sangre, elementos que generalmente ocupa Quentin Tarantino en sus películas, fueron determinantes para que el realizador no dudara en incluir ese acontecimiento en su producción más reciente Once Upon a Time in Hollywood, protagonizada por Leonardo DiCaprio, Brad Pitt y Margot Robbie, quien interpreta a Tate.
La película debutó en la segunda posición de la taquilla en su estreno en Estados Unidos con un estimado de 40.35 millones de dólares y llegará a las salas cinematográficas de México a finales de este mes.
De acuerdo con la sinopsis, el filme está ambientado en la época de los 60, durante los asesinatos de la familia Manson y cuando la industria empezaba a olvidarse de los pilares clásicos.
Una inspiración en la moda y el cine
El año pasado, el Museo de la Moda inauguró la exposición “Sharon Tate: celebrando su vida”, que incluyó prendas de su vida cotidiana como vestidos, minifaldas y accesorios, y se entraba en la belleza y estilo de la modelo.
Ella apareció por primera vez en la televisión en 1963 con dos pequeñas intervenciones en la serie Mister Ed, tiempo después se convirtió en “Janet Trego” para Los Beverly Ricos (1963-65). Tras acaparar cientos de portadas de revistas, Eye of the devil supuso su debut en el cine en 1967.
Ese mismo año protagonizó también Don’t make waves, Valley of the dolls, por la que fue nominada al Globo de Oro, y Dance of the vampires, de Roman Polanski.
El 20 de enero de 1968, Sharon se casó con el cineasta Polanski en Londres, rodeados de conejitas de Playboy y grandes celebridades de Hollywood; ese año llegó a los cines The wrecking crew, en la que compartió créditos con Dean Martin.
Tate se abrió paso en el mundo del cine y la moda, incluso ejemplificó el “auténtico espíritu de la chica californiana, más bohemio y relajado”, destacó la revista Vogue.