En 2015, Brenda Rogel se convirtió en la primera mujer socia de Hogan Lovells BSTL en México, uno de los principales despachos de abogados a nivel global. Con diversos reconocimientos internacionales, la abogada impulsa la equidad de género más allá del ámbito organizacional.
Rogel Salgado, quien se especializa en práctica de materia ambiental y recursos naturales, minería, salud, normas oficiales mexicanas, protección al consumidor y entretenimiento, enfatiza que las cuotas de género son necesarias, pero no por ello permanentes.
Un camino distinto para alcanzar la equidad laboral
El tema ha sido abiertamente debatido por las compañías, varias de ellas se han pronunciado en favor de garantizar la igualdad de oportunidades a través de instrumentos organizacionales diferentes al establecimiento de una cuota de género en su plantilla laboral, sin embargo, la abogada de Hogan Lovells asegura que éstas deben implementarse:
«Necesitamos impulsos positivos y temporales que nos hagan romper todas las barreras que no permiten que haya equidad de género. No estoy diciendo que las cuotas deban existir de aquí a cien años, pero si son bien implementadas por diez años podrían ya no necesitarse».
La abogada comenta que una de estas barreras es el suponer que a través de este instrumento podrían llegar mujeres no capacitadas a diversos cargos. «Es un error, ya tenemos fuerza laboral suficientemente capacitada», agrega.
El estudio Inclusión de la Mujer en Puesto de Liderazgo, presentado por Abogadas MX en colaboración con el Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección (CIMAD) del IPADE y MAREA Consulting, indica que, una de las principales barreras que se presentan en las organizaciones para incluir a más mujeres en posiciones de liderazgo es la cultura mexicana tradicional:
«Algunos hombres y mujeres fueron educados bajo roles definidos tanto en el trabajo como en el hogar, y éstos se ven reflejados en las empresas. La cultura de la empresa se construye por las creencias y valores de las personas que la lideran y conforman, de tal manera que si encontramos personas con creencias que no incluyen a las mujeres o limitan su participación por sesgos conscientes o inconscientes, se verá reflejado en la postura que tienen sobre el papel de la mujer en la empresa».
Para Brenda Rogel es erróneo considerar que no existen sesgos conscientes o inconscientes dentro de las decisiones de las empresas: «Si pensamos que estamos tomando las decisiones con equidad de género nos estamos equivocando».
La socia de la firma de consultoría legal considera que la conciliación de la vida familiar y laboral debe desarrollar un equilibrio paralelo a las nuevas políticas de inclusión, con la finalidad de que en el presente las mujeres puedan tomar decisiones o nuevos cargos sin miedo a renunciar a un ámbito de su vida.
«Que no haya existido una mujer en una posición a la que nosotras queremos llegar no quiere decir que no se puede, hay que hacerlo y colaborar para que existan las condiciones propicias para no descuidar ningún aspecto personal mientras se desarrolla el profesional», finaliza.