La nigeriana Okonjo-Iweala hizo historia al convertirse en la primera mujer y líder africana en dirigir la Organización Mundial del Comercio
Este lunes, la nigeriana Okonjo-Iweala fue elegida para tomar las riendas de la Organización Mundial del Comercio (OMC), con lo que pasa a la historia como la primera mujer y líder africana en ocupar el puesto.
La también economista, toma el mando del organismo que no tenía director general desde el 31 de agosto de 2020, cuando el brasileño Roberto Azevedo dejara el cargo para asumir un puesto directivo en la multinacional PepsiCo.
«Agradezco la confianza depositada en mí, al tener en cuenta no sólo mi identidad como mujer y africana, sino también mi experiencia y mi pasión», dijo tras confirmarse su designación.
Okonjo-Iweala, de 66 años, tiene 25 años de experiencia en diferentes puestos dentro del Banco Mundial (BM). Hoy fue elegida con el consenso de las 164 economías de la OMC, incluida la de Estados Unidos (EU), que hace cinco meses era la única que rechazaba su nombramiento.El cambio de gobierno en el país norteamericano propició que la nueva administración de Joe Biden cambiara su parecer.
«Espero trabajar con todos para construir la OMC que todos queremos, una organización que sea dinámica, robusta y apoye al desarrollo sostenible mediante el comercio», aseguró la africana.
La economista, que también tiene nacionalidad estadounidense, se formó en dos de las universidades más prestigiosas de EU: la Universidad de Harvard y el Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT).
Esta no es la primera vez que la líder hace historia,ya fue la primera mujer ministra de Finanzas de su país (puesto que ostentó dos veces, de 2003 a 2006 y de 2011 a 2015), y también la primera en ocupar la cartera de Asuntos Exteriores, aunque sólo durante tres meses, en 2006.
Desde 2015 ha sido consejera de compañías como Twitter y la entidad financiera Standard Chartered, así como de organizaciones como la Alianza para las Vacunas GAVI, fundamental en la actualidad para la distribución de vacunas contra la COVID-19 en países en desarrollo.