Por Perla Velázquez/Notimex
La historia comienza con un post de Jennifer Rosado en Facebook, y a finales de 2018, un grupo de mujeres se unió para realizar tocadas con viniles, iniciativa con un impacto que ha sorprendido.
“Cuando la leí, decía algo así como: ¿coleccionas discos en vinil?, ¿te interesaría formar parte de un colectivo? Estamos buscando mujeres interesadas en la cultura del disco del vinil”, comentó María Delirium, del colectivo Mujeres Vinileras.
De acuerdo con Jennifer Rosado, entre los objetivos que tenía el colectivo desde un principio estaba el de reunir a mujeres que estuvieran interesadas en el mundo del vinilo, que tocaran o que les interesara involucrarse de alguna u otra manera.
Para ella, un vinil “es el inicio de lo que siempre me ha gustado, es como el nacimiento de todo esto, regresar la historia, retroceder el tiempo, las personas, los momentos”.
En 2018, el colectivo cerró con más de 40 mujeres que querían ser parte del grupo, unidas por el amor a los vinilos.
Las mujeres vinileras (sonideras)
Jennifer Rosado detalló que también alojan a otros grupos, “el colectivo Musas sonideras, que fue organizado por Marisol Mendoza; ella logra convocar a 45 sonideras, no solamente del país sino también de Estados Unidos”.
Los colectivos de viniles no son nuevos. Desde hace años existen “sound systems”, en donde los hombres son la cabeza del grupo. Éste era un reto para las mujeres vinileras: ser en un espacio patriarcal.
El colectivo tiene el objetivo de abrir la escena, que más mujeres puedan participar no solamente tocando, sino también fortaleciendo sus propias habilidades.
El hecho de ser mujeres en la escena, se vuelve como un aspecto político y estar en la música, que es una escena súper patriarcal y violenta, también significa un montón de resistencia.
“Al final vamos todas hacia un lugar que es apoyarnos entre nosotras para tener una presencia mucho más sólida, dentro de un gremio que ha sido básicamente para los chicos”, indicó Tabata “Doctora Tabatone”, otra integrante del colectivo.
El colectivo Mujeres Vinileras ha ampliado sus espacios para presentarse; ese paso es el que las ha distinguido. No sólo buscan las fiestas, porque el distintivo social y compartir su experiencia es lo que las une.