Por: Taisha Landeros
Stranger Things, producción original de Netflix, nos ha demostrado que todos sus personajes están cargados de valentía, estoicismo y solidaridad. Y aunque amamos a los protagonistas masculinos, es innegable decir que las mujeres son el eslabón más fuerte del equipo.
Desde Eleven hasta Nancy Wheeler, cada una de ellas nos ha representado imponentes y poderosas frente a un contexto totalmente distinto al que vivimos. Recordemos que gran parte de la serie se ambienta en los años 80, época que coincide con la segunda ola del feminismo en Estados Unidos.
Durante dicha década, las exponentes femeninas demandaban el derecho al sufragio y al aborto de la mujer. Este hecho las hizo crear encomiendas constitucionales que abolieran la desigualdad de género, mientras surgían nuevas oportunidades para aquellas que buscaban su liberación profesional.
Estos tintes son bien representados en la producción de los hermanos Duffer, quienes le dieron a cada joven un valor único. Érica, la más joven del clan, es uno de mis ejemplos favoritos al llevar su inteligencia al otro nivel. Jamás deja que la hagan sentir inferior, al igual que Nancy y Max, quienes demostraron su fortaleza al término de la quinta temporada.
¿Qué otras lecciones feministas nos ha dado Stranger Things? Aquí te las compartimos.
- Las mujeres somos heroínas
“Eres mi heroína”, le dice Mike a Eleven, protagonista que ha librado grandes batallas empezando por su pasado. La pérdida de su madre y la carencia de una figura paterna no la doblegaron. Sus inmensas cualidades le permitieron encontrar el amor en sus amigos y Hopper, quien daría la vida por su pequeña “Ce”.
Su fortaleza quedó reflejada una vez que se enfrentó a quien se llamaba su padre. Tras deambular por sus recuerdos, ella reconoció sus miedos y decidió que nadie más la detendría para llevar a término sus decisiones.
Con gran valor, Eleven nunca se rindió, ni siquiera en la batalla final contra su máximo enemigo: Vecna.
- Somos capaces de romper paradigmas
Por supuesto, Robin se merece una mención especial. En el contexto de la serie, era difícil que una mujer develara su verdadera identidad sexual por miedo a los prejuicios. Sin embargo, la mejor amiga de Steve, decidió abrirse a él para contarle sus sentimientos y exponer lo duro que es vivir entre las sombras, con el fin de no ser señalada.
►TE PUEDE INTERESAR► Miedo al cambio: ¿Qué es y cómo enfrentarlo?
Quizá no lo ha gritado al mundo, pero su acto sirvió de voz para quienes todavía no han dado el paso. Quizá una de las ilusiones que más han cosechado los fans es que tanto ella como Will (un personaje que también dio señales de pertenecer a la comunidad LGBT), encuentren a una persona con quien ser ellos mismos.
- Nuestra resiliencia es admirable
Joyce Byers es una madre ejemplar y completamente capaz de hacer lo que sea por sus hijos. Luego de su divorcio con Lonnie Byers, ella tuvo que convertirse en jefa del hogar, mientras criaba a su decendencia. Cuando Will desaparece a manos del Demogorgon, vimos a una mujer desesperada, mas completamente dispuesta a mover cielo, mar y tierra hasta encontrarlo.
Su valentía volvió a confirmarse cuando viajó a Rusia para traer de regreso a Hopper, aun cuando ella no tenía la certeza de que él estaba vivo. Sin temor alguno, enfrenta cualquier tipo de reto y no se acobarda, ni siquiera cuando el escenario resulta devastador.
Joyce no es un estereotipo solo de lo que significa ser madre, ella también es la inspiración de quienes nos vemos como mujeres empoderadas y libres.
- Somos dueñas de nosotras mismas
Uno de los diálogos de la temporada tres entre Mike y Max fue vital para entender lo maduros que son estos personajes pese a su corta edad. Cuando Eleven sostiene una pelea con su novio, ésta corre a los brazos de su mejor amiga para olvidarse de los problemas amorosos.
Cuando el caos arriba de nuevo a Hawkins, Mike se siente temeroso por lo que le pueda ocurrir a su primer amor. Esto lo lleva a ser un tanto obsesivo, y, por miedo a perderla, desea interponerse para que no se enfrente una vez más al Desollamentes. Max no concuerda con él y pregunta: “¿quién creen que debería decidir los límites de Once?”.
Nuestra pelirroja continúa para afirmar: “Ella no es tuya, es una persona capaz de tomar sus propias decisiones”. Con ello, nos hace ver que no existen límites para nosotras, somos dueñas de nuestro destino; tenemos libre albedrío y nadie nos lo puede arrebatar.
La serie se ha ganado a los fans por contener un mundo de referencias feministas que nunca se fuerzan gracias a la excelente construcción psicológica de sus personajes. Incluso los chicos han evolucionado al grado de otorgarle la batuta a las chicas del equipo. Por esto y otras razones es que amamos Stranger Things.
Te recomendamos seguirnos en nuestras redes sociales: Facebook, Twitter e Instagram.