La artista y empresaria Sandra Cepeda fusionó, hace un par de años, sus conocimientos en pintura, escultura, y arquitectura con su interés por el emprendimiento y la innovación, para incursionar en el mundo de los metales; consiguiendo, desde entonces, crear su primera colección joyera titulada «Bones».
Ésta primera se conformó a través de la selección de ciertas piezas de sus pinturas, las cuales duplicó en un objeto de tres dimensiones para que fueran funcionales a base de joyería.
Posteriormente llegaría su segunda colección: «Hombres de mi vida», cuya aceptación fue buena para el mundo masculino, ya que se enfocó en potencializar su energía a través de mancuernillas y otras piezas propias para varones.
Después de estos trabajos, Cepeda ha decidido dedicarse de manera formal al diseño de joyería, y este año ha presentado su tercera colección y marca: “Sandra Cepeda, joya de arte”.
Propiamete dicho, la tercera colección es llamada, por su creadora, “Mandrágora”, inspirada en la planta milenaria del mismo nombre y que se caracteriza por tener una raiz muy parecidad a la forma de un bebé, razón por la cual, de acuerdo a datos históricos, era un elemento usado por brujas para hacer conjuros.
“En esta colección, en los diseños de las joyas fluyen las energías eróticas y sexuales, sin llegar a lo vulgar. Evoco a la sensualidad y a la unión de los seres. También está inspirada en las pinturas del artista Carlos Génova”, mencionó Cepeda, tras adelantar que ya trabaja en su siguiente entrega que estará inspirada en muralistas mexicanos como Diego Rivera y David Alfaro Siqueiros.
“Esta es una especie de transición mía como artista, donde estoy usando la técnica en oro, donde estoy incursionando en un mundo empresarial, donde la gente le llama joyería de autor, pero sin dejar mi mundo de artistas y mostrar todo mi trabajo como escultora”, dijo.
Debido a la positiva respuesta, que afirma haber tenido por parte del público, visualiza lanzar al mercado, para el 2019, perfumes en barra coleccionables. Abundó que cada envase será una miniescultura en plata para que al acabarse su contenido, el estuche pueda tener otro tipo de uso, como un pastillero o un joyero.
En su tienda virtual sandracepeda.com se aprecian algunas de las piezas que ella describe como atemporales, porque así como están dirigidas a mujeres entre 20 y 45 años de edad, también pueden ser usadas por mujeres adultas o adolescentes.
Por lo pronto. quienes estén interesadas en adquirir sus piezas para portar una «joya de arte» sobre su outfit ejecutivo u obsequirsela a algún caballero, pueden adquirir sus piezas en el Four Seasons de la Ciudad de México; en Careyes, Jalisco; y en Estados Unidos.
“Yo voy a seguir siendo artistas, voy a seguir pintando, exponiendo y creando todo ese tipo de arte, y como artista plástico llevo mis diseños a la joyería”, concluyó la artista visual, curadora y directora de arte.
Fuente: Agencia /Edición: BHR