Muchas veces creemos que una persona que es un buen líder siempre tiene que decir que sí, estar disponible o asumir cualquier reto; la verdad es que no siempre tiene que ser así y también es bueno aprender a decir «no» en el trabajo.
En un entorno donde se nos pide ser los más ágiles y eficientes, hay que saber manejar nuestro tiempo, definir nuestras prioridades; para esto, es necesario encontrar el equilibrio que nos hará llegar a nuestro crecimiento profesional y emocional.
Estas son algunas herramientas que puedes utilizar para decir que no:
- “Me parece bien”
Muchas veces por medio del conocimiento a la otra persona podemos determinar si la otra persona tendrá una reacción negativa al decir ‘NO’. Es por eso que puedes utilizar esta expresión que refuerza el apoyo y ánimo para finalizar con el NO.
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- Aplazar o dar alternativas
Si tu deseo es no descartar del todo la petición o solicitud, la solución es negociar un nuevo horario, fecha, lugar (realizar ajustes en la petición inicial) en donde puedas hacerla cuando te sea más fácil.
- No alargues tu respuesta
En pocas palabras, ve al grano. Darle vueltas a la respuesta cuando es una negativa no es lo más conveniente. Por eso, hazlo en el menor tiempo posible para evitar malos entendidos que no lleven a nada positivo.
- No pretendas caerle bien a todos
Casi todos estamos acostumbrados a decir que SÍ por la educación que hemos llevado, pero es momento de dejar ese mal hábito y comenzar a poner límites, siempre apelando a tu buen juicio.
- Agradecimiento
Una de las mejores herramientas es esta: cuando te pidan tu apoyo en alguna actividad, primero agradece que te hayan tomado en cuenta para llevarla a cabo o que te vean como una posible solución; sin embargo, comenta al finalizar que en esta ocasión no podrás ayudar.
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