Más allá de prohibir su desarrollo, promover el reciclado de las bolsas de plástico, así como implementar la regulación en su material y diseño, son parte de la solución real al problema ecológico, según la Asociación de Industriales de la Bolsa de Plástico (Inboplast).
José Anguiano Hernández, presidente de Inboplast explicó que el problema de las bolsas de plástico ha sido magnificado incorrectamente, lo que ha provocado daños severos hacia este sector productivo, pues, consideró, que la solución al riesgo ecológico es sólo de índole cultural y educativo.
“Estamos buscando a nivel federal por medio del Senado que se imponga una norma técnica que sea para todos en el país, ya que nosotros nos topamos con normas e iniciativas municipales que nos afectan por la percepción que se tiene de nuestro producto”, dijo.
Mencionó que no debería creerse que las bolsas de plástico son causantes del desastre ecológico cuando representan menos del 1.0 % de los desechos plásticos. “Es sólo un problema de separación de basura por parte de la ciudadanía para ponernos a trabajar en el reciclado de estos productos”.
De esta forma, dio a conocer que las 50 empresas asociadas en Inboplast y que producen 70 % de las bolsas de plástico que consumen los mexicanos, quieren impulsar una norma técnica federal para regular la fabricación de bolsas de polietileno y fomentar su reciclaje, a fin de reutilizar estos productos tan necesarios en la sociedad.
“El propósito es que estos productos valgan más que en un basurero, es materia prima y tenemos que reutilizar esas bolsa para que no paren en un vertedero”, añadió.
Anguiano reiteró que si no separamos la basura y la llevamos al destino que debe de ser, el problema ecológico seguirá creciendo, pero es urgente, más que leyes prohibitivas, llevar a la práctica la cultura del reciclado.
Puntualizó que con la puesta en marcha de una norma técnica se ayudará a fomentar el reciclaje y la reutilización en la industria del plástico, así como a eliminar la idea equivocada de que las bolsas de plástico son las causantes de la contaminación, porque la solución real es el destino de las mismas. “Las bolsas no llegan solas a los océanos”, resaltó.
Por Lucía Lizárraga Castro