Lo sabemos, crear un balance casi perfecto entre tu vida personal y profesional podría ser bastante estresante. Más aún cuando, hoy en día, las tareas del hogar deben combinarse junto con los deberes del home office. ¿La solución? Aquí te la vamos a dar.
Es importante que, antes de iniciar, siempre recuerdes diferenciar entre lo que te motiva y lo que no.
Paso 1. No esperes a que todo encaje para empezar. Da el siguiente paso por pequeño que sea. No siempre se dan las circunstancias idóneas.
Paso 2. Planifica para persistir. Hacer lo que debes o tengas previsto te ayudará a cumplir tus metas a corto plazo.
Paso 3. Comparte. Compartir metas, gustos y disgustos generará una mejor comunicación y mejore relaciones interpersonales.
Paso 4. Puedes interesarte en casi todo, sólo date una oportunidad.
Paso 5. Haz las tareas y rutinas atractivas para ti. Siempre es mejor si lo que haces resulta agradable.
Paso 6. Decide por qué vas. La ilusión y el empeño hay que trabajarlos.
Paso 7. Potencia el autocontrol. Fija límites y pautas. Responsabilízate de las consecuencias de tus actos.
Paso 8. Cuenta con las dificultades. Sobrepasa las dudas y valora otras alternativas.
Paso 9. Simplifica fácil o imposible. La perfección no se alcanza cuando no hay nada más que añadir, sino cuando no hay nada más que quitar.
Paso 10. Toma tu vida profesional como algo personal. La vida no hace distinciones.
Y como dijo Woody Allen, “El 90% del éxito se basa en insistir”.
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