Moss se alió con Valérie Messika, quien colabora en este proyecto a través de su firma Messika
La modelo Kate Moss incursiona en el mundo de los negocio con el lanzamiento de su primera colección de alta joyería, la cual describe como versátil e integrada por piezas para usar de día y de noche.
Para este negocio, Moss se alió con Valérie Messika, hija de André Messika y figura destacada del negocio internacional del diamante, quien colabora en este proyecto a través de su firma Messika.
El resultado ha sido una propuesta «ecléctica y con una diversidad controlada» con la que rendir homenaje a la versatilidad de la que ha trascendido generaciones y estilos, señaló Messika en un comunicado.
En este sentido apuntó que a primera vista los diseños se alejan de la estética acostumbrada por la joyería, sin embargo, finalmente lograron confluir en más de cien piezas. Por lo que la colección, explicaron, no pierde el espíritu de la casa, pero tampoco la esencia del estilo de Kate Moss que tantas mujeres copian.
La propuesta de estas dos creativas mujeres se concentra en el movimiento de las piezas, la fluidez de las líneas, la flexibilidad de las joyas, que unifican en lenguaje único: el oro, las diferentes tallas de diamantes y el uso de materiales preciosos.
Grandes volúmenes, diseños inspirados en el «art decó», donde no faltan collares, pendientes, anillos para tres dedos, gargantillas, tobilleras, «ear cuff» e incluso joyas para sombrero, todas ellas con un distintivo común, el pompón.
Una colección «cómplice y creada por instinto», explicó Valérie Messika, que introduce el color con malaquitas nácar y turquesas. Mientras ambas mujeres consiguen con brazaletes y gargantillas crear piezas que se funden sobre la piel como un tatuaje.
Piezas minimalistas que a pesar de su valor pueden ser el complemento ideal sobre un suéter negro para resaltar el brillo de los diamantes, pero sin duda también las mejores para una noche de gala.