Por Graciela Rojas*
Cuando eres adolescente te encuentras en una etapa en donde la elección de vida y carrera se torna difícil. Por un lado, valoras lo que te gusta hacer; por otro, evalúas lo que es más prometedor para obtener un buen estilo de vida.
La segregación de adolescentes y jóvenes en ciertas áreas de estudio y trabajo limita sus oportunidades de empleo. Este fenómeno se hace crítico si se analiza con perspectiva de género, de acuerdo con el BID, únicamente 36% de las mujeres tienen actividades dentro de las 20 ocupaciones mejor remuneradas, frente al 64% que participa en los 10 empleos menos remunerados.
Es por ello, que Movimiento STEM (ciencias, tecnología, ingeniería y matemáticas, por sus siglas en inglés) lanzó el programa Desarrollo de Talento STEM, dirigido a jóvenes de educación secundaria y nivel medio superior, quienes están a punto de tomar una de las decisiones de mayor impacto en su vida.
Para acompañarlos en este proceso e incentivar ocaciones STEM, se les acerca a contenidos, role models, conferencias interactivas y un test de orientación vocacional, así como un espacio virtual en el que reciben coaching y mentorías por profesionales STEM para apoyarlos en su desarrollo personal y profesional.
Actualmente se está beneficiando a 10 mil estudiantes de preparatorias públicas y privadas de la ciudad de México y zona metropolitana.