Tras 11 días de su desaparición y luego de reforzar su búsqueda, este miércoles fue hallado el cuerpo de la medallista olímpica Blanca Fernández Ochoa, de 56 años, en el pico de La Peñota, punto cercano a Cercedilla, en la sierra de Guadarrama, Madrid.
El sargento de la Guardia Civil, Francisco Borreguero, quien estaba de descanso, pero se ofreció como voluntario junto a su perra Xena para participar en la búsqueda, fueron quienes hallaron los restos de la esquiadora, quien en 1992 ganó bronce en los Juegos Olímpicos de Albertville.
También se informó que el cadáver presenta un golpe en la cabeza por lo que se cree que la esquiadora y madre de dos hijos, sufrió una caída mortal. La última vez que se conoció de su paradero fue el 24 de agosto, cuando acudió al Hipercor de Pozuelo de Alarcón, donde hizo unas compras y después un lugareño la vio dirigirse hacia el punto donde hoy fue hallada sin vida.
El Instituto Anatómico Forense de Madrid se hará cargo de la autopsia, a fin de determinar la causa del deceso y después se prevé que se rinda un homenaje póstumo a la deportista.
Este miércoles, diversas personalidades, así como instituciones y organizaciones deportivas escribieron mensajes de condolencias a los familiares y amigos de Fernández Ochoa, como fue el caso de la Policía Nacional que dio el pésame a los deudos y agradeció a los voluntarios que participaron en la búsqueda. Descanse en Paz.