El síndrome de “burnout” ha provocado que cientos de mujeres se sientan desmotivadas en labores que deberían amar. El estrés, así como la desmotivación, son algunos síntomas de un problema que está afectando a las empresas y sus colaboradores.
¿Qué es el síndrome de burnout?
El también conocido como “síndrome del trabajador quemado” se refiere al estrés laboral crónico, el cual se presenta mediante un agotamiento físico y mental generalizado. Su padecimiento puede alterar el autoestima y personalidad de quien lo padece.
Progresivamente, los trabajadores sufren pérdida de interés por sus actividades. Además, surge una percepción negativa hacia la ocupación que se desempeña, lo que al final produce la aparición de síntomas físicos.
Éste se relaciona exclusivamente con el desempeño laboral, puesto que no debe confundirse con depresión, misma que afecta otros ámbitos de nuestra vida.
Principales síntomas del síndrome de burnout
- Aparición de síntomas físicos: Dolor de cabeza, fatiga crónica, náuseas, insomnio y tensión muscular.
- Síntomas psicológicos: Irritabilidad, desmotivación por las tareas realizadas, falta de contacto social, descenso de la productividad y confianza en sí mismo.
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- Incapacidad y distanciamiento: Existe incapacidad para responder a las demandas del servicio que ofrecemos, mientras nos volvemos indiferentes ante aspectos que antes nos apasionaban.
- Falta de antecedentes psicopatológicos: Usualmente, el padecimiento de estos signos mentales y conductuales se originan en individuos que nunca habían presentado otros padecimientos psicológicos.
“¡Renuncio!”: El estrés laboral aumenta en México
De acuerdo con el estudio Adaptabilidad laboral post-pandemia en México ejecutado por OCC Mundial, la principal razón por la que las mexicanas y mexicanos renuncian es por el síndrome de burnout. El informe reveló que 30% de los trabajadores sufren desgaste físico y/o mental en su área, mientras que un 24% ha padecido frustración.
Entre otros motivos que lleva a los empleados a renunciar son: falta de equilibrio en la vida laboral – personal, aspectos económicos, y búsquedas de mejores sueldos y oportunidades de desarrollo.
Otro dato importante, es que durante la pandemia empeoró el estado de ánimo de los colaboradores, dado que 8% se siente frustrado y el 6% maneja estrés constante.
¿Cómo puedo enfrentarlo?
Daniela Socha, psicóloga organizacional y magíster en Desarrollo Organizacional y Recursos Humanos, proporciona las siguientes recomendaciones para su control:
- Trabajar la autoperfección para dejar de presionarnos a nosotras mismas.
- Jerarquizar tareas, dando prioridad a las que tienen carácter de urgente.
- Poner límites reales a los jefes para evitar las presiones.
- Combinar una alimentación balanceada con actividades de ocio.
- Reducir el consumo de sustancias alcohólicas y realizar ejercicio por lo menos tres veces a la semana.
- Renovar la comunicación con amigos o familiares con los que has dejado de convivir por el síndrome.
- Buscar atención psicológica para que te proporcionen herramientas que te ayuden a superarlo.
- Si tu trabajo no te hace feliz, busca una nueva vocación que se acople a tus propósitos y te haga sentir satisfecha.
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