El síndrome del “nido vacío” afecta a los padres cuando los hijos se van de casa, hay que comprender que este no es un diagnóstico clínico, sino que es un fenómeno que los padres experimentan ante la partida de los hijos.
Y es que el motivar a los hijos a que vuele y tomen las riendas de su vida para volverse independientes no significa que a los padres no les duela, pero es comprensible ya que se experimenta un cambio repentino en su vida cotidiana.
¿Cómo impacta la vida de los padres?
Primeramente, los padres enfrentan un sentido de pérdida profundo, los hace sentir más vulnerables a la depresión, adicciones e incluso llegan a los conflictos matrimoniales.
Sin embargo, no todo es malo, el que los hijos vuelen del nido también tiene beneficios en otros casos, ya que los progenitores ahora pueden reencontrarse como pareja, mejorar el rumbo de su relación matrimonial y también retomar viejos hobbies.
¿Qué puedo hacer ante el nido vacío?
- Ayuda a que tu hijo sea exitoso cuando salga de casa, no te guíes por lo que tu hiciste a su edad, todos tenemos tiempos y ritmos diferentes.
- Mantén el contacto con llamadas, mensajes de texto o videollamadas sin sofocar.
- Comparte tus sentimientos, consulta a tu médico si en algún momento sientes que ya no es normal la tristeza.
- Enfoca tu energía a lo que puedes mejorar en tu vida.
Si te preocupa que te afecte la partida de tu hij@ y no quieres atravesar por este síndrome puedes planificar nuevas oportunidades en las áreas de tu vida que quieras, acepta nuevos desafíos laborales y personales, bien dicen que el que se ocupa no extraña pero también reencuéntrate contigo mismo.
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